UN PUENTE EN LA TIERRA DE LOS RÍOS

UN PUENTE EN EL RIVERLANDS

Las huestes de guerra del Norte cruzan el río mientras los arqueros cubren
su avance... así es la guerra en territorio Tully.

Me llamo Rior. Soy constructor. Fui Aprendiz de Maestre en La Ciudadela hace muchos años, pero los ríos de la vida (como a mí me gusta llamar al ajetreo incierto de nuestra efímera existencia) me trajeron aquí, a Riverlands, donde construí mi hogar y formé una familia. 


Mi Señor Edmure, por orden de su venerable padre - los Siete lo guarden muchos años - me ordenó, hace hoy cuatro meses, que idease y levantase un puente sólido, un puente de piedra. 


Esta labor es algo habitual aquí, en esta tierra, pues los cientos de ríos, afluentes y arroyos que surcan este vasto territorio, hacen de él un lugar fértil pero de difícil comunicación. A veces cuando el encargo urge y se trata de algo más bien provisional, el puente se ordena construir en madera. Pero otras, como ha sido esta vez, el puente debe ser testigo imperecedero del paso del tiempo. 


Bien saben los Señores lo importante que es que las mercancías, que los productos de la tierra, los tintes, los tejidos y otros enseres muy preciados, así como los mismos hombres, mujeres y niños, puedan llegar desde otros lugares del Reino allí donde ellos se aposenten. Incluso los más exóticos productos llegados de Pentos de Braavos de Myr, del mismísimo Qohor, que son muy deseados por nobles y cortesanos. Sin embargo, yo creo que mi Señor está pensando más en la guerra que se barrunta que en otros menesteres. Rugidos y aullidos azotan el eco de días pasados en los que la devastación de una guerra unificó los Siete Reinos bajo la figura de nuestro Rey Robert Baratheon, recientemente fallecido.  


Es con esa nebulosa siempre sombría y horrible de la guerra en mi entendimiento, y con la obligación y el sentido del deber para con mi Señor, que he dado fin a su deseo y el puente está ya construido. Ojalá que los hombres que lo transiten no mezclen su sangre con la arcilla ni con ella le den color a las abundantes y cristalinas aguas de estas tierras.

Sigo haciendo los deberes. No paro... mi pluma no para (que mal suena eso, no?), la pluma del cuervo sigue en sus trece... aquí está el puente... me faltan un par de detalles y lo subo en un PDFFFffffffffffffffgssghahjjkjk

Un saludo desde Territorio Tully.